Artesanías indígenas preferidas por extranjeros

Interculturalidad


Segundo Murga confecciona variedad de prendas para los gustos más exigentes. (Foto El Heraldo)

Las destrezas de los artesanos de los pueblos indígenas del Ecuador son admiradas en el mundo. Ponchos, anacos, bufandas y demás prendas de vestir son adquiridas, sobre todo por norteamericanos y europeos.

Segundo Murga es uno de miles de artesanos oriundos de Otavalo que recorre el país promocionando y vendiendo prendas en cuerina y lana.

Lleva 22 años en esta actividad y su mercado no solo es Ecuador, sino también el exterior: Francia, Italia y España, donde han comprobado la calidad de sus artículos.

“Confecciono chompas, sacos, gorras, ponchos, pulseras. Ofertamos variedad de cosas para complacer el gusto de los clientes”, indicó.

Otavalo es sede del mercado artesanal indígena más grande de Sudamérica y sus productos se encuentran por el mundo, ya que la influencia de sus artesanías ha logrado salir de la nación desde los años 80.

Hoy los otavaleños están por casi todos los continentes exponiendo sus artesanías, música y cultura.

Murga tiene un puesto de venta en la Plaza de Ponchos de Otavalo. Allí los sábados expende sus productos a precios bajos. El resto de días viaja a distintas ciudades para difundir sus artesanías.

El historiador padre Juan de Velasco señala que el hombre otavaleño proviene de poblaciones que migraron de El Caribe y que llegaron a tierras altas de lagos y montañas atravesando la cordillera Occidental  por el río Esmeraldas.

En cuanto al origen de las comunidades imbayas, sarances y otavaleña se puede afirmar que en momento de la migración fueron interactuando grupos de cazadores-recolectores, por la necesidad de subsistir.

Esto generó  conocimiento del medio: plantas y animales. A tal punto que desarrollaron sistemas de agricultura, irrigación, domesticación de animales y, de manera lenta y paulatina, empezaron a producir ricas expresiones artesanales, alcanzando niveles elevados de organización y producción.

Estas formas de organización de los imbayas, sarances y en especial las de los otavaleños fueron codiciadas por los incas, que comandados por Túpac Yupanqui avanzaron hacia Atuntaqui, Cayambe y Otavalo para dominarlos.

Situación que no fue fácil, ya que Hualcopo y Caranqui, junto con caciques de Cayambe y Otavalo, organizaron una resistencia inquebrantable que duró aproximadamente 17 años. (I)

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